Era un jueves, el equipo argentino llegó en el primer vuelo y no teníamos idea de cómo sería el trabajo y la sinergia, ya que no nos conocíamos. Otromundo se encargaba de la producción general, Bridger de la idea y JP (director argentino) de la dirección. En la primera reunión no tenía de cómo sería cada persona, era como nuestra primera cita y estábamos contra reloj, había que consumar el amor antes del rodaje ya que soy una fiel convencida de que en cualquier relación debe haber química, más cuando se trata de algo tan intenso como un comercial de televisión.
Recuerdo a JP mirando los castings, a los 10 minutos dije “este tipo no me cae tanto pero la tiene clara” yo mirab a l@s chic@s en el video y no veía nada, el tiraba frases como: “a esta le ponés una campera de cuero, una pañoleta y los labios rojos y flasheamos todos”, decidí confiar y creer en su criterio.
En 48 horas teníamos, castings, locaciones, arte, vestuario y estilismo definido, todo el equipo estaba en sintonía, pero yo no había estado ahí, solo leía en los 5 grupos del wsp en los que estaba metida, mientras tanto mi trabajo era otro, el aburrido, el que a simple vista parece que nadie hace, pero OJO! es tan importante como los demás, yo debía ir tras el dinero para que cada área tenga todo lo que necesitaba.
Veía las fotos en algunos grupos, los actores parecían sacados de un club subterráneo en algún lugar de Ámsterdam o Paris, sí esos actores que en los videos yo no los veía. Todo el estilo, el make up, el vestuario eran perfectos, JP había logrado lo que me hizo imaginar el primer día.
Llego al lugar, y siempre voy a volver a soprenderme de lo que una máquina de humo puede lograr. PUM! Crucé esa línea de gas y me sentía en la fiesta, todo el equipo lookeado, parecía que yo misma estaba en una discoteca quien sabe donde, la cerveza se veía tan fría y perfecta, y era todo tan normal, como si realmente lo estuviesen viviendo y la verdad es que la mejor manera de actuarlo es vivirlo y por sobre todo sentirlo. Parece medio banal y superficial que escriba así sobre un comercial de cervezas, pero es que mi frase es siempre, que “si no lo sientes con el corazón, no lo hagas” y eso se aplica a todo.
Salí del lugar, no hable con agencia, de hecho no me cayeron bien al comienzo (sorry Naku y Guille : ), pero soy humana y a veces los humanos somos prejuiciosos), no me los quise cruzar, yo sabía que ellos estaban en buenas manos con Charly y Geoge los productores de Otromundo.
Salí volando, tenía otras producciones que ir a ver, pero entrar y salir de cada locación y puesta en escena se sentía diferente. Pasaron las 12 horas, el equipo de producción siguió despierto descargando todo el material.
El cuarto día ya no podía escapar, tenía que juntarme con agencia y hacer el aguante, elegí un lugar para comer mucha carne y tomar cerveza, llego y recuerdo que Naku me recibe con una sonrisa y el chamullo kurepa (argentino) que por más que no queramos nos cae bien de entrada, estaba feliz, se le notaba, y luego me dice: “no pensé que me iban a caer tan bien, ni que íbamos a trabajar tan bien”, UFFF! TODAS MIS MURALLAS se cayeron por arte de magia. NO quería aceptarlo, pero eran buenos en su trabajo y yo sentía lo mismo, y el prejuicio lo tuve que metérmelo ya saben dónde, porque hay cosas que se sienten adentro y cuando eso pasa hay que darnos una segunda oportunidad, no a ellos, sino a nosotros, de ver en el otro lo que tienen de genial, de confiar y dejarlo trabajar.
Nos quedamos hablando hasta tarde, Naku, JP Y Guille… hoy, 3 años después seguimos trabajando juntos, a pesar de la distancia, a pesar de las diferentes idiosincrasias en las que nos criamos, a pesar de ser personas completamente diferentes. Y supongo que eso se da porque supimos ver y apreciar lo que el otro tiene para dar, cada quién en su área.
POR MENOS PREJUICIOS y MAS AUDIOVISUAL
CLIENTE: CERVEPAR-BUD 66
AÑO: 2017
AGENCIA: BRIDGER CONWAY – ARGENTINA